Aunque no me gustan demasiado estas fiestas comerciales, estuve la semana pasada sopesando si regalar a Marta un marco de fotos hecho de macarrones
Pues la respuesta era: a) ropa, b) pintada, y c) que no tenga mucho donde pintar. Así que unas alpargatas de las de toda la vida de esparto, pintadas con acrílico han sido el regalo.
Menuda complicación. El tejido de las alpargatas tiene una pelusa que hace imposible pintar con un mínimo de confianza (usé acrílicos). Si usaba agua, se desparramaba la pintura por todo el tejido, y usando mucha materia era como amasarla. En fin, acabé a tiempo dos pares de alpargatas y aquí están:
Unas cerezas y la "gran ola" de Hokusai.
¡¡El par con la ola de Hokusai es genial!!
ResponderEliminarMe parecen geniales las hokualpargatas!!!!
ResponderEliminarMuy bueno Tayete.
Ha sido una idea GENIAL! Te felicito.
ResponderEliminarSi quieres otra idea: pintar sobre un abanico (de los que venden en tiendas de los chinos, anónimos por un €).
Saludos. Joshemari
Tayete...preciosas esas alpargatas pintadas, genial idea, y muy bien realizadas...
ResponderEliminarUn abrazo.Enrique.
Muchas gracias a todos por los elogios. Las de Hokusai fueron un curre de narices, pero ha merecido la pena.
ResponderEliminarJoshemari: gracias por la idea, nunca se me hubiera ocurrido.
Ostras, qué bonitas. Muy originales. Y bien escogidos y realizados los dibujos. Muy chulas.
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